La infidelidad causa en las personas secuelas emocionales difíciles de superar.
La infidelidad causa en las personas secuelas emocionales difíciles de superar.

Ser infiel puede traer dos cosas a la vida: placer momentáneo y desgracia. En la coyuntura, resulta inevitable no enterarse de quién le fue infiel a otro, por eso, el psicólogo Martín Zurita analiza este impulso que padecen tanto hombres como mujeres.

“Hay tipos de infieles, están los que padecen un transtorno narciscista de personalidad que se creen egocéntricos y eso hará que no tengan empatía. Entonces, eso da luz verde a tener otras relaciones sin importar el costo”, señala el especialista para Diario Correo.

Según Zurita, otra característica de una persona infiel es que son muy histrionicas y teatreras. “Te pueden decir te amo y que eres el amor de su vida, hasta pueden llegar a llorar, pero acá hablamos de un ser compulsivo que lo hace reiteradas veces”, explica.

Centrándonos en el infiel compulsivo, su factor común es que reiteradamente ‘saca la vuelta’. “También padece de una personalidad psicopática, que es una persona con cero empatía y no compromete afectos”, concuerda.

Es importante resaltar que el infiel compulsivo no lo ve como un problema, por el contrario, es un estilo de vida. “Creo que en el mundo real habrá ocasiones donde uno deberá tomar decisiones, la infidelidad es una decisión que tiene que ver con la madurez”.

Para el especialista, la persona propensa a ser infiel tiene que aprender a valorar todo lo que ha logrado con su pareja. Es decir, no cambiar un momento de placer por toda una vida.

“Hay que tener mucha conciencia plena para tomar una decisión que no afecta la calidad de vida”, asevera.

¿El infiel compulsivo cambia?

De acuerdo al profesional, las personas de este tipo tienen escasas probabilidades de cambiar puesto que se comportan bajo creencias. En muchos casos, ideas machistas y de superioridad.

“Este tipo de infieles tiene una probabilidad escaza de que cambie porque ese comportamiento responde a un esquema mental que la persona tiene, pero también hablamos de una persona narcicista que tiene el mismo patrón”, comenta.

Llevando esta situación al mundo del espectáculo, es recurrente ver personajes que caen en la infidelidad como un “círculo vicioso”.

¿Perdonar a un infiel es sano?

Para Zurita, lo que no es negociable en la vida son los principios y valores. “Si una persona violó la lealtad o confianza, tu lo puedes perdonar pero habrá un conflicto porque está yendo en contra de tí”, explica.

“Perdonar no es olvidar, es procesar”, añade. En los casos de infidelidades repetitivas, es válido considerar que no hay mucho que perdonar porque la persona en falta puede hasta mentir con el fin de ser perdonado.

¿Cómo superar una infidelidad?

Lo primero que se debe hacer, según Zurita, es no meter la vida a la congeladora. “Primero ir a terapia y conectar con la cosas que te gustan hacer. Seguro vas a llorar y sufrir, pero si te quedas quieto eso puede derivar en una depresión”, concluye.

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