En el 2023. La región Ica estuvo sometida a esto se puede comprobar con las más de 600 denuncias por el mencionado delito, que se registraron el año pasado, donde las víctimas narraban las pesadillas que vivieron al ser y varios casos involucrando a bandas criminales extranjeras.

Atentados con explosivos

El año pasado, la tasa por el delito de extorsión se incrementó en un 89 %, si se compara con las denuncias registradas en el año 2020, en ese año el Ministerio Público registró en las fiscalías provinciales penales y mixtas 77 denuncias por extorsión, mientras que para el 2023, la cifra es alarmante y llegó a 651 denuncias por el peligroso ilícito penal.

Aunque las denuncias por extorsión aumentaron, las modalidades por las que este crimen es ejecutado también son múltiples y se encuentran entre las principales víctimas, los gremios de construcción, transportistas, y el año pasado se registraron decenas de denuncias de pequeños empresarios. Algunos dueños de empresas, por temor mantienen su identidad reservada, sin embargo, indicaron ante las autoridades conocer casos de amigos que tienen restaurantes, y quienes han sufrido cobro de cupos, varios vinculados al “gota a gota”. Los casos de extorsión perjudican la economía, ya que causa temor en empresarios y dificulta el establecimiento de nuevos negocios.

La estadística de la Fiscalía detalla que cada año las extorsiones a nivel nacional y regional se elevan y el año pasado pareciera que este crimen se instaló por completo en el departamento iqueño, ya que mientras en el 2020 se registraron 77 denuncias por extorsión, para el 2021 la cifra se elevó a 171 denuncias, en el 2022 fueron 409 y el año pasado se disparó a 651, evidenciando que en materia de seguridad el gobierno terminó el 2023 a la deriva.

Especialistas coinciden en que actualmente los extorsionadores tienen nuevas herramientas para realizar el delito criminal. Asimismo, el aumento de la criminalidad extranjera ha traído consigo nuevas prácticas extorsivas, por ejemplo, en Pisco existen denuncias de ataques criminales con granadas y dinamitas, que detonan los delincuentes en puertas de los locales comerciales o hasta en las propias casas de las personas que extorsionan y no acceden al delito.

Este acto criminal que es el que más cometen las bandas criminales para atemorizar a las personas, también se ha elevado a nivel nacional. En el Perú, en el 2020 hubo 2 mil 305 denuncias por extorsión, para el 2021 la cifra se elevó a 4 mil 119, ya en el 2022 casi se triplica y llegó a 11 mil 642 denuncias. En el 2023 las extorsiones en el país totalizaron 19 mil 401 víctimas, la cifra sería aún mayor, ya que gran cantidad de ciudadanos no denuncian por miedo a que los criminales puedan atentar contra su integridad física o la de su familia.

VIDEO RECOMENDADO